Bienvenida soledad,
antigua amiga mía,
como andas,
aquí me encuentras
hacía tiempo que no te veía
si, ya sé,
yo también te había abandonado
pero hoy la suerte ha cambiado
y aquí me encuentras
buscando tu compañía
tomémonos una agüita de tila
o un toronjil pa’ la pena
porque hoy mi alma llena
está de tu compañía.
Si amiga mía
sola, tan sola,
como antes
recuerdas?
sólo que hoy duele más
antes éramos tu y yo
pero cuando todo cambia
y se debe volver atrás
duele más
mucho más.
Ayyy, amiga… espero me acompañes
y no te sigo hablando
porque una lágrima furtiva
se va escapando
de mis ojos ya cansados
de tanto soportar y aguantar el llanto
bueno, amiga soledad, ahí nos vemos…
tu eres por ahora lo más cercano
que tengo…